El subdirector del FBI estaría considerando renunciar tras polémica por los archivos de Epstein, según fuentes
Por Kristen Holmes, Kaitlan Collins, Hannah Rabinowitz y Evan Perez, CNN
El subdirector del FBI, Dan Bongino, dijo a personas cercanas que está considerando renunciar en medio de un fuerte enfrentamiento entre el FBI y el Departamento de Justicia por las repercusiones continuas de la publicación del memorando de Jeffrey Epstein, afirmaron fuentes familiarizadas con el asunto a CNN.
Esto ocurre después de un acalorado enfrentamiento con la secretaria de Justicia, Pam Bondi, sobre el manejo del caso a principios de esta semana.
La disputa interna por el caso llegó a un punto crítico durante una reunión el miércoles, en la que participaron Bongino, Bondi, el director del FBI, Kash Patel, y la secretaria general de la Casa Blanca, Susie Wiles, según las fuentes. Bongino y Patel fueron cuestionados sobre si estaban detrás de una historia que afirmaba que el FBI quería que se divulgara más información, pero que finalmente fue bloqueada por el Departamento de Justicia, indicaron.
Bongino negó haber filtrado esa información a NewsNation, que publicó la historia, dijo una fuente familiarizada con el asunto a CNN, aunque no firmó una declaración defendiendo la revisión incluida en ese artículo.
CNN ha contactado a Bongino y al FBI para obtener comentarios. Las fuentes advirtieron que Bongino no ha tomado una decisión y es posible que permanezca en su puesto. Axios fue el primer medio en informar algunos detalles del enfrentamiento de Bongino en la Casa Blanca.
El episodio ocurre mientras muchos de los asesores cercanos de Donald Trump, tanto dentro como fuera de la Casa Blanca, se han mostrado cada vez más frustrados con el manejo de Bondi de los llamados archivos Epstein, tras días de intensas críticas de algunos de los seguidores más leales del presidente.
Varias fuentes dijeron que Bongino no se presentó a trabajar este viernes, lo que alimentó las especulaciones de que había renunciado por el tema. Una de esas fuentes dijo que hasta la tarde de este viernes no había dejado su cargo.
“Todo esto ha sido un completo desastre y nadie está contento”, dijo a CNN una fuente informada sobre el asunto.
Epstein es un financiero caído en desgracia y delincuente sexual convicto cuyo caso penal ha captado la atención pública, en parte por sus vínculos con personas ricas y de alto perfil. En agosto de 2019, mientras esperaba juicio en un caso penal federal, Epstein fue hallado inconsciente en su celda en el Metropolitan Correctional Center de Nueva York. Fue trasladado a un hospital, donde se le declaró muerto. Su muerte fue catalogada como suicidio.
Sin embargo, la muerte fue objeto de gran escrutinio, y durante su campaña de 2024, Trump dijo que consideraría publicar archivos gubernamentales adicionales sobre el caso. Muchos de los seguidores del presidente esperaban que esa publicación implicara a otras figuras de alto perfil o desacreditara la idea de que Epstein se suicidó. Pero el Departamento de Justicia anunció en un memorando el lunes que no había evidencia de que Epstein tuviera una “lista de clientes” ni de que hubiera sido asesinado, lo que desató la ira y sospecha entre los simpatizantes de Trump.
Funcionarios del FBI y del Departamento de Justicia llevaban meses en desacuerdo sobre el manejo de la revisión de los archivos Epstein. Pero la tensión se hizo pública este viernes, cuando la provocadora de extrema derecha Laura Loomer, cercana a personas de la administración, escribió en redes sociales que Bongino y Patel estaban “FURIOSOS” con Bondi por el caso Epstein. Loomer escribió que Bongino “se tomó el día libre hoy de su trabajo como subdirector del FBI, y ahora hay especulación sobre si regresará o no a su puesto”.
El fiscal general adjunto de EE.UU, Todd Blanche, negó una ruptura entre la dirección del Departamento de Justicia y el FBI en una publicación en X este viernes, diciendo que “la sugerencia de que hubo alguna diferencia entre la dirección del FBI y el Departamento de Justicia sobre la redacción y publicación de este memorando es rotundamente falsa”.
El subsecretario de prensa de la Casa Blanca, Harrison Fields, dijo que Trump ha “reunido a un equipo de ley y orden altamente calificado y experimentado, dedicado a proteger a los estadounidenses, responsabilizar a los criminales y hacer justicia a las víctimas”.
“Este trabajo se está llevando a cabo de manera fluida y con unidad”, dijo Fields. “Cualquier intento de sembrar división dentro de este equipo es infundado y distrae del verdadero progreso que se está logrando para restaurar la seguridad pública y buscar justicia para todos”.
Bondi organizó un evento en la Casa Blanca en febrero con influencers a favor de Trump para presentar carpetas de documentos relacionados con Epstein, aunque luego fue criticada cuando los influencers se dieron cuenta de que la mayoría de los documentos ya eran públicos desde hace años. Patel tuvo una participación mínima en ese evento. Más recientemente, Bongino repitió promesas de que los archivos serían publicados, incluso mientras intentaba restar importancia a su contenido.
Al menos una de las frustraciones de Bongino está relacionada con un video de vigilancia de 10 horas tomado fuera de la celda de Epstein en Manhattan el día de su muerte, de acuerdo con una persona familiarizada con la situación.
Mientras los investigadores revisaban durante semanas los registros relacionados con la investigación de Epstein, Bongino descubrió el video, según la fuente. El subdirector se mostró eufórico por el hallazgo y dijo que era una prueba definitiva de que Epstein no había sido asesinado, según la fuente.
Sin embargo, tras la publicación del video, miembros del público y la prensa observaron que el video saltaba hacia adelante, omitiendo 60 segundos.
Bondi ha dicho públicamente que el sistema de grabación, ya obsoleto, se reinicia cada día a la medianoche y que el mismo minuto se omite cada noche. Aun así, las teorías sobre lo que ocurrió en ese minuto explotaron en internet, y Bongino fue culpado internamente por el descuido.
Patel y Bongino han expresado en privado su frustración durante meses por el manejo del caso por parte del Departamento de Justicia, en parte debido a una entrevista temprana en la que Bondi insinuó que el FBI aún revisaba el caso, cuando ya había sido entregado al Departamento de Justicia, de acuerdo con fuentes familiarizadas con el asunto.
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